DIPLOMACIA | Investigarán origen de los reportes
Estados Unidos incluyó a Venezuela en su lista negra por considerarlo "un país de origen, tránsito y destino de hombres, mujeres y niños que son traficados para ser explotados sexualmente o laboralmente" y por no hacer "esfuerzos significativos para cumplir con los estándares mínimos", lo cual puede provocarle sanciones.
EL UNIVERSAL
martes 28 de junio de 2011 08:54 PM
Caracas.- Venezuela consideró el martes una "intromisión" el informe de Estados Unidos que lo pone en una lista negra de países que trafican con personas y anunció que investigará si funcionarios norteamericanos en Caracas son el origen de estas informaciones "sin fundamento".
El gobierno venezolano "rechaza de la manera más contundente, la política injerencista del gobierno de los Estados Unidos, que consiste en publicar informes que revelan la permanente intromisión del Departamento de Estado en asuntos internos de otros países", asegura un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores en Caracas, informó AFP.
El lunes, Estados Unidos incluyó a Venezuela en su lista negra por considerarlo "un país de origen, tránsito y destino de hombres, mujeres y niños que son traficados para ser explotados sexualmente o laboralmente" y por no hacer "esfuerzos significativos para cumplir con los estándares mínimos", lo cual puede provocarle sanciones.
Según el gobierno venezolano, esta lista es una "práctica aberrante" que no cuenta "con legitimidad jurídica o técnica alguna" ya que las informaciones son "una suma de generalidades sin fundamento ni respaldo, que traducen más los prejuicios políticos de la burocracia estadounidense sobre el gobierno venezolano, que los resultados de una investigación seria e imparcial".
En su comunicado, el gobierno afirma que "no ha proporcionado ni proporcionará informaciones a ningún gobierno extranjero sobre aspectos que son exclusivos de su interés soberano" y anuncia una "investigación profunda para determinar la responsabilidad de funcionarios de la embajada de Estados Unidos en Caracas en la elaboración de tales informes".
"Esto constituiría una extralimitación de las funciones diplomáticas para las cuales han sido acreditados", advierte el documento.
Estados Unidos y Venezuela mantienen relaciones diplomáticas inundadas de altibajos y actualmente no tienen embajadores. Larry Palmer, embajador designado por Washington para asumir la embajada en Caracas, fue vetado por el presidente Hugo Chávez a finales de 2010 debido a unas declaraciones realizadas sobre Venezuela durante su proceso de ratificación.
Posteriormente, Washington retiró el visado diplomático al representante venezolano, Bernardo Álvarez.
El gobierno venezolano "rechaza de la manera más contundente, la política injerencista del gobierno de los Estados Unidos, que consiste en publicar informes que revelan la permanente intromisión del Departamento de Estado en asuntos internos de otros países", asegura un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores en Caracas, informó AFP.
El lunes, Estados Unidos incluyó a Venezuela en su lista negra por considerarlo "un país de origen, tránsito y destino de hombres, mujeres y niños que son traficados para ser explotados sexualmente o laboralmente" y por no hacer "esfuerzos significativos para cumplir con los estándares mínimos", lo cual puede provocarle sanciones.
Según el gobierno venezolano, esta lista es una "práctica aberrante" que no cuenta "con legitimidad jurídica o técnica alguna" ya que las informaciones son "una suma de generalidades sin fundamento ni respaldo, que traducen más los prejuicios políticos de la burocracia estadounidense sobre el gobierno venezolano, que los resultados de una investigación seria e imparcial".
En su comunicado, el gobierno afirma que "no ha proporcionado ni proporcionará informaciones a ningún gobierno extranjero sobre aspectos que son exclusivos de su interés soberano" y anuncia una "investigación profunda para determinar la responsabilidad de funcionarios de la embajada de Estados Unidos en Caracas en la elaboración de tales informes".
"Esto constituiría una extralimitación de las funciones diplomáticas para las cuales han sido acreditados", advierte el documento.
Estados Unidos y Venezuela mantienen relaciones diplomáticas inundadas de altibajos y actualmente no tienen embajadores. Larry Palmer, embajador designado por Washington para asumir la embajada en Caracas, fue vetado por el presidente Hugo Chávez a finales de 2010 debido a unas declaraciones realizadas sobre Venezuela durante su proceso de ratificación.
Posteriormente, Washington retiró el visado diplomático al representante venezolano, Bernardo Álvarez.